a Don Raul!!!
Algo muy personal!!
Hoy le digo adios a ese hombre que me enseño que la política puede y debe ser un arte que tiene que estar inexorablemente al servicio de los pueblos y no al revés!!! Con sus aciertos y errores, me demostró que se puede soñar con una sociedad mejor que sea capaz de convivir en paz y tolerancia anteponiendo siempre el respeto sagrado a las libertades y los derechos humanos. El Doctor Raúl Alfonsín representa para mí un ejemplo constante. Su humildad, honestidad, sentido de la ética y valentía, quedaran cómo mensajes y valores de una vida de desprendimientos y entregas.
Cómo dijo alguna vez Quino, en una síntesis casi insuperable: Alfonsín fue ese que nos demostró que todo lo que nos enseñan en la escuela, puede ser verdad. Su obra política nos habla siempre de diálogo, de paz, de lucha incansable por la justicia, por la igualdad de oportunidades. De amor por el prójimo.
En la campaña de 1983, Alfonsín me enseño que: "Con la democracia se come, se educa, se cura". Más allá del tiempo que se tarde, Alfonsín convocó a esa utopía. Fue su fatalidad y su privilegio, como la de los hombres imprescindibles en la Historia. Se fue Raúl Alfonsín, padre de la democracia moderna argentina, militante, candidato, presidente, estadista, hombre de bien, correligionario. Ese mismo hombre que siempre buscó un mejor país donde las instituciones funcionen correctamente sin demagogia ni populismos. “Sigan ideas, no sigan a hombres” nos dijo en su última aparición pública, espero que un día aprendamos a seguir ideas, a amarlas y defenderlas, a luchar por ellas, a vivir por ellas y llegado el caso si es preciso, morir por ellas!!!
Gracias Don Raúl!!!
Hoy le digo adios a ese hombre que me enseño que la política puede y debe ser un arte que tiene que estar inexorablemente al servicio de los pueblos y no al revés!!! Con sus aciertos y errores, me demostró que se puede soñar con una sociedad mejor que sea capaz de convivir en paz y tolerancia anteponiendo siempre el respeto sagrado a las libertades y los derechos humanos. El Doctor Raúl Alfonsín representa para mí un ejemplo constante. Su humildad, honestidad, sentido de la ética y valentía, quedaran cómo mensajes y valores de una vida de desprendimientos y entregas.
Cómo dijo alguna vez Quino, en una síntesis casi insuperable: Alfonsín fue ese que nos demostró que todo lo que nos enseñan en la escuela, puede ser verdad. Su obra política nos habla siempre de diálogo, de paz, de lucha incansable por la justicia, por la igualdad de oportunidades. De amor por el prójimo.
En la campaña de 1983, Alfonsín me enseño que: "Con la democracia se come, se educa, se cura". Más allá del tiempo que se tarde, Alfonsín convocó a esa utopía. Fue su fatalidad y su privilegio, como la de los hombres imprescindibles en la Historia. Se fue Raúl Alfonsín, padre de la democracia moderna argentina, militante, candidato, presidente, estadista, hombre de bien, correligionario. Ese mismo hombre que siempre buscó un mejor país donde las instituciones funcionen correctamente sin demagogia ni populismos. “Sigan ideas, no sigan a hombres” nos dijo en su última aparición pública, espero que un día aprendamos a seguir ideas, a amarlas y defenderlas, a luchar por ellas, a vivir por ellas y llegado el caso si es preciso, morir por ellas!!!
Gracias Don Raúl!!!